3.11.07

Joven dramaturgia mexicana

Desde hace un mes o más – en la editorial no se preocuparon por avisar – circula un ensayo que titulé De la joven dramaturgia y otros monstruos en la Revista Tierra Adentro, y en la que, entre otros datos, doy cuenta de algunas de las características que agrupan a las personas que responden a los siguientes nombres: Carlos Nohpal (DF, 1971), Conchi León (Mérida, 1972), Edgar Chías (DF, 1973), Mario Cantú (Monterrey, 1973), Jorge Kuri† (Estado de México, 1974), Rafael E. Martínez (Sonora, 1974), Alfonso Cárcamo (DF, 1974), Alejandro Román (Cuernavaca, 1975), Martín López Brie (Buenos Aires, 1975), Mariana Hartasánchez (DF, 1976), Richard Viqueira (DF, 1976), Verónica Bujeiro (DF, 1976), Luis Ayhllón (DF, 1976), Noé Morales Muñoz (DF, 1977), Luis Santillán (DF, 1977), Alberto Villarreal (DF, 1977), Denisse Zuñiga (DF, 1980), Hugo Abraham Wirth (Iztapalapa, 1981) y Alejandro Ricaño (Xalapa, 1982).

Sobresale la concentración del centro del país, específicamente la capital. Sin embargo, el norte cabalga aprisa para entregar sus credenciales. De la costa del Golfo de México, Xalapa se mantente como un bastión no sólo de dramaturgos, sino de teatristas en general, y el Pacífico brilla por su ausencia, con él Guadalajara y el Bajío. El Sur, condenado a las apariciones esporádicas, mantiene en Mérida su mejor porvenir, esto es lo que hemos denominado la Joven Dramaturgia Mexicana y he sido yo el verdugo.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Carnal... Te han pirateado un post y una foto. Qué cagado. Estaba navegando de aquí a allá y me encontré un textículo que es igual al tuyo, sobre el poder, los intelectuales y el teatro, íntegro. Se me hizo raro porque ya lo había leido pero sobre todo porque ahí estaba una foto de una obra tuya donde aparece Pilar Cerecedo...

Ya alguien se la había hecho de peso, así que sgeuro ya lo sabes, pero es nada más para avisar.

http://urraca3k.blogspot.com/2007/10/teatroteatro-vs-intelectuales.html

Atte. Mario Mendoza
un saludo

Anónimo dijo...

Ah, qué mamada... Ya lo vi, no es la gran cosa.

Anónimo dijo...

Nel, ya lo quitaron...
¿Dónde se consigue tu ensayo?

Gracias...

Anónimo dijo...

Son pocos, en realidad son pocos los jóvenes dramaturgos en México contando el rango generacional que manejas. Unos pronto ya no serán tan jóvenes.
Habría que hacer un llamamiento, porque de que se escribe, se escribe, y no sólo eso, se publica. Lo que sucede es que no hay distribución. Los libros se quedan almacenados en bodegas. No hay interés en distribuir de las editoriales locales porque creen que su trabajo acabó cuando el libro salió de imprenta. Una verdadera pena. Hay muchos escritores sepultados en vida sólo por eso.

Saludotes Olmos,
desde la coordenada norte de México,

Liliana Pedroza.

Enrique Olmos de Ita dijo...

No sé si pocos, Liliana. Pero buenos. No creo que el tema sea la cantidad, sino la calidad. Los Contemporáneos no eran ni diez y cambiaron el rostro de la cultura de un país. De acuerdo en que los libros salgan de las bodegas (los de la UNAM, por ejemplo). Aunque un libro no garantiza nada, también hay sendas publicaciones universitarias, locales, autoediciones o antologías que son más bien gasto de papel y alivio del ego del escribao, he formado parte de un par de antologías que han pasado al olvido justamente. Además, en la dramaturgia la obra vale en escena, los libros con obras dramáticas son más bien especies en peligro de extinción.

Anónimo dijo...

pocos y PUTOS, todos...