24.2.08

Gao Xing-jian (Ganzhou, China, 1940)

"¡El teatro vive hoy bajo la dictadura de los directores escénicos! Y esto ocurre desde los años sesenta. A lo largo de la historia, primero tuvimos el teatro de actor. Luego llegó el teatro de autor, donde alguien exponía su pensamiento en una pieza. Por fin llegó el teatro de director, en el que el director del montaje lo domina todo: texto, juego actoral, mensaje..., todo. Los actores se vuelven marionetas en manos del decorado y, lo que es peor, ¡de la tecnología! Yo no lo apoyo. Yo quiero volver a lo esencial, que es el texto y el actor.
El mensaje es política, nunca arte. El arte con mayúsculas encierra un valor universal que sobrepasa los intereses, las épocas, las guerras, lo provisional. Sé que algunos intelectuales, con lo que escriben, se erigen en portavoces del pueblo y tonterías así. Eso ha sido terrible en el siglo XX, tan marcado por el marxismo y la idea de que podemos cambiar el mundo. Pero nadie puede hacerlo.
Sí, y es triste ese juego. Un intelectual debe ser lo suficientemente maduro para saber distanciarse de la política. Yo estoy frontalmente contra la dictadura y contra la censura, pero para estarlo y sentirme bien moralmente, me obligo a permanecer al margen de lo político. En política, las palabras lo esconden todo, según el interés. En el arte, no. En ese sentido, el arte es más veraz que la historia.
El mercado es una forma de autocensura. Hablamos mucho de la censura, pero no de autocensura, y es aún más grave. La primera es evidente, se puede ver. La segunda, no. Pero está por todas partes."

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Me ha gustado la reflexión. Opino algo parecido: hace falta más peso de lo sencillo y un mayor respeto de la relación esencial texto-autor. Aparte de por razones políticas, porque el efectismo contribuye en poco a la perdurabilidad del efecto; en realidad, lo expande, pero hasta desintegrarlo. Luego te marchas con dolor de ojos y un vacío en el conjunto de alma-cabeza que es el que a la larga nos mueve.

¿Me das tu permiso para llevármela? ¿De dónde procede la cita?

Un abrazo,

Gonzalo

Enrique Olmos de Ita dijo...

Gonzalo, carnal:

De una nota aparecida en El País donde le hacen una entrevista a este chino Nobel - aparecida el domingo en cultura - saqué las partes que me gustaron más, y que creo que resumen el pensamiento de este autor terriblemente mal traducido, ignorado y hasta vilipendiado en nuestra lengua.
Es hora de conocerle, creo.
Llévate lo que quieras.

Abrazo.

Paula Muñoz Inclán dijo...

¡Qué descanso!, saludos afectuosos.