Apareció hace días en El País un reportaje muy interesante sobre el consumo cultural en España. Lejos todavía de la media europea, los hábitos culturales en el estado español mejoran, por un lado respecto a la calidad de lo que se lee, escucha y atisba como espectadores, por otro, en la frecuencia de este "consumo" (¿La cultura se consume?, dicho sea de paso).
Sin embargo, más allá de cierto triunfalismo mediático, sucede que la cultura elitista bajó al suburbio porque no había riesgo ni desprestigio en ello, porque el negocio así lo necesitaba y también porque las sociedades cambian, un poco y lentamente a través de la educación principalmente.
Veo contradicciones, pero al mismo tiempo claras mejorías en lo que respecta a la cultura de masas y el (des) prestigio de la oferta cultural tradicional, todavía es pronto para preguntarnos ¿somos más cultos?
3 comentarios:
A mí me dio la impresión de que el artículo confundía la nube con el cambio climático, lo pasajero y circunstancial con lo significativo y estable. Si hace nada el autor más vendido con diferencia era Dan Brown (de una calidad ínfima, a mi modo de ver), ¿cómo va a haber cambiado la situación de la noche a la mañana? Por otro lado, los superventas de calidad suelen ser pasajeros, pero en el XIX inglés, por ejemplo, un Dickens vendía mucho de modo sostenido.
Un saludo cordial
Hermano Gonzalo:
De acuerdo totalmente contigo, por eso decía que era pronto para hacer un diagnóstico y que las contradicciones afloran, además de lo mediática de la información, por el supuesto termómetro para medir este "consumo", sin embargo, y por otro lado, es innegable que editoriales serias (451, Anagrama, Acantilado, Libros del asteroide, Periférica y Sexto Piso, por ejemplo) han aumentado sus ventas en época de crisis. Y el teatro sigue teniendo espectadores, incluso ha mejorado en muchos sentidos sus entradas.
Saludos bróder.
La pregunta aquí está en duda. La pregunta allá es demasiado pronta, como tú lo dices, pero con una respuesta favorable a lo que leí. Es extraño que en plena crisis exista un visible aumento de espectadores. Quizá se deba a la necesidad de requerir algo que el teatro aporta. No soy critico, sin embargo una válvula de escape es en lo que pienso.
Postdata: Es cierto, el Defectuoso está feo. Lo único que me gusta son algunas calles, privadas y soberbias, empedradas escondidas por los rincones de San Ángel. ¿Quieres arriesgarte a presentar tu libraco en ese lugar? =P Yo me arriesgo para ir a verte si vas.
Saludos mi hermano
¡Que estés bien!
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